Cajas

En un rincón de mi casa , casi olvidadas en el descuido, están mis cajas.Cada una de ellas esconde recuerdos distintos.Pero hay una en particular que es la más preciada por mí, ahí tengo guardadas cartas de amigas y de novios, envoltorios de caramelos, chocolates y demás golosinas, fotos, entradas a boliches de días que fueron memorables,letras de canciones,flores secas, etc. En esa caja se esconde un pedacito de los momentos más importantes de mi vida.Hoy se me ocurrió abrirla, cosa que hago una vez cada varios meses.Cada vez que me decido a internarme en mis recuerdos termino con una sonrisa enorme en mi rostro y con el corazón casi saliendo de mi pecho.Entre tantas cosas estaba el sobre con todos mis recuerdos de Mr. C. En la parte delantera un sticker con un conejito (bastante cursi y patético)dice: "Me has hecho tan feliz!".Creo que esa frase lo resume todo.

Con Mr C. nos conocemos desde siempre.Nos vimos muchas veces pero nos miramos después de mucho tiempo.Empezamos nuestra tormentosa y muy poco aburrida relación en el 2004.Cuando, dos años más tarde, decidí ponerle fin a esa historia, me alejé de él con el corazón deshecho y un año por delante que recorrería tratando de olvidarlo.Fue mi primer, y único, GRAN AMOR.Lo amé de verdad, con toda el alma, confundida, equivocada, obsesionada porque las cosas funcionaran, empeñada en cambiarlo, pero lo amé.Pasaron ya casi tres años de eso, y puedo decir que nunca volví a querer tanto a alguien.Mr. C. fue mi antes y después, me cambió, para bien...para mejor.Fue un maestro, un compañero, el que logró derribar una enorme pared que algunos años antes había construido delante de mí.Con sus errores y defectos, sus tropiezos y desaciertos, fue inolvidable.Simplemente no eramos el uno para el otro y nuestros caminos se bifurcaban aunque no lo quisieramos aceptar.


Entre los recuerdos que hay en ese sobre de él ,encontré ese anillo que una vez me dio, inesperada e impulsivamente pidiéndome que me casé con él, una madrugada de Julio en mi casa con demasiadas copas de más pero con una convicción arrolladora.Así era él, una topadora, un huracán que llegaba y arrasaba con todo.Inclusive con mis estructuras.Me volví más cursi, por dos años deje de ser yo.Y la que volvió sin lugar a dudas estaba cambiada.Mr. C. se volvió el punto de comparación de mis relaciones posteriores, y de relaciones ajenas también.


De tantas cosas que le escribí , y que todavía me ponen la piel de gallina, hubo una que me llamó la atención.Por su sinceridad, por su crudeza.Porque de verdad representa lo que sentía.


"...Y recién cuando te alejaste me cuenta que estaba conteniendo la respiración...Ahí comprendí que me había enamorado, cuando nadie lo imaginó y de quien nadie lo imaginó, ni siquiera yo...y quizás más de lo que debería.


Olvido lo que un día me hizo sufrir y me aventuro en otra historia, de la que no conozco el desenlace, y que tiene las peores predicciones, pero aún así me sorprendo sin miedo a nada y con todas las intenciones de luchar por esto, hasta el final."


Guardo todo con cuidado y lo meto en la caja.La dejo de nuevo minuciosamente descuidada y olvidada, para otra noche en la que, por esos vuelcos de la vida, sienta que tal vez me estoy olvidando de quién fuí.